
En el gimnasio. Martín Fabro espera turno. El otro Martín, Aguirre, realiza ejercicios.
Alegría, euforia y ansiedad es lo que están viviendo los jugadores de Godoy Cruz después de ganarle el sábado a la Lepra, un partido que lo dejó cerca del ascenso.
Ayer volvieron al trabajo en el Feliciano Gambarte encarando la semana previa al choque del sábado a las 15.30 ante Ben Hur, en el Malvinas Argentinas. Un trabajo liviano en el gimnasio y después regenerativo fue la primera actividad posclásico.
Además, hubo mucha charla entre los integrantes del plantel para manejar la ansiedad que se genera por el cercano retorno del Tomba a primera división, lo que puede suceder si le ganan a la BH y Belgrano empata o pierde el jueves con Quilmes.
Mientras tanto, el técnico Daniel Oldrá tiene un rompecabezas para armar la defensa por las expulsiones de Darío Salomón y Julio Moreyra. A esto hay que sumarle que Jorge Curbelo, lesionado, no podrá jugar lo que resta del torneo.
La alternativas que maneja el técnico son el ingreso de Marcos Barrera y Ariel Rojas. En el ataque también podría haber variantes e ingresaría el paraguayo Luis Ovelar. El esquema con tres hombres en el fondo no cambiaría.
Si bien faltan varios días para el próximo partido, el probable equipo sería: Nelson Ibáñez; Marcos Barrera, Guillermo Franco y Gabriel Vallés; Gerardo Solana, Nicolás Olmedo, Daniel Garipe y Martín Aguirre; David Ramírez (tiene un golpe pero igual jugaría); Leandro Caruso y Luis Ovelar.
El plantel bodeguero quedaría concentrado el miércoles, pero aún no está confirmado. Lo que sí es seguro es que en la Bodega seguirán con mucha atención el partido entre Belgrano y Quilmes, el jueves en el adelanto de la fecha.
Los jugadores están hablando con los dirigentes por el premio del ascenso.
Fuente: Uno.
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