Lejos, el peor partido del Lobo

Agustín Sanfilippo fue el más temido por el conjunto puntano. Él y Arce se encargaron de darle claridad a las jugadas mensanas.

Lejos, el peor partido que jugó el Lobo en todo el Apertura del Argentino A, porque fue mezquino no sólo en lo futbolístico, sino que se dejó vencer anímicamente después del segundo tanto de la Juve, a los 4’ del segundo tiempo.

Todo hacía pensar que el equipo de Dubanced iba a querer realmente despedirse del año con una victoria, porque a los 14’ la sociedad protagonizada entre Álvarez y Arce en el área de la visita fue rápida y efectiva. Entrando al área, Salinas siguió la jugada después de la falta sobre Arce, para devolverle el balón a Álvarez quien anotó. Pero el árbitro santafesino, Ezequiel Blanchet, decidió cortar la jugada segundos antes de que el delantero tirara al arco. Obviamente que las protestas cayeron sobre el colegiado, que cobró la falta sin permitir la ventaja que le daría el gol al Mensana.

Pese a lo sucedido, Gimnasia equilibraba su juego sin permitir que los puntanos crecieran. Hasta que, en la primera llegada de Juventud Unida, de contra, el goleador del torneo, Walter Albarracín, recibió el centro de Sosa para anotar de palomita a los 28’, sorprendiendo y causando escalofríos a los conducidos por Dubanced.

Sin embargo, Gimnasia, pensando en poder remontar ese grueso error defensivo, continuó buscando el control del balón. Sanfilippo se proyectaba por la izquierda con libertad, ganando las marcas para llevar temor a la zona puntana, con Álvarez, y en menos ocasiones con Salinas. Pero el arquero Mulieri estuvo atento para evitar los goles del Blanquinegro volando hacia los palos, saltando para sacarla al córner o simplemente reteniéndola en sus manos. Importante la labor del arquero puntano, quien debutó como titular desde el arranque en lugar de De Lemos (desafectado del plantel).

Después del descanso, la Juve sorprendió nuevamente. Su segundo intento fue efectivo e impactante en la gente del Parque. El tiro Libre de Montenegro a los 4’ le permitió al Teto Medina cabecear para sumar. Festejó de San Luis. Tristeza y bajón mendocinos.

Hasta aquí, la derrota podía explicarse con los errores del plantel mensana, sobre todo al descuidar los contragolpes del rival. Pero la decisión del técnico despertó la protesta de todo el estadio. Sacó a los dos hombres más importantes de la cancha, a Sanfilippo y a Arce, y Gimnasia, en ese preciso momento, dejó de existir en el campo de juego.

Como si fuera poco, a los 32’ la Juve anotó el tercero en una jugada idéntica a la anterior. Bronca, decepción e impotencia fue lo que causó la jugada, porque indudablemente las cartas en la mesa demostraron la ineficaz de Gimnasia para corregir errores que evidentemente se repitieron.

Casi sobre el final, y para peor, García fue expulsado.

En esta ocasión (fecha 15) la derrota no fue cuestión de suerte o como dicen “porque el fútbol es así”. La falta de actitud, de sentimiento, y de orgullo es la única explicación de la peor derrota gimnasista.

Fuente: Los Andes.